Precioso, lo primero que he visto al levantarme de la cama, mirando al este, ha sido una rajita de luna en cuarto menguante pero bastante grande y luminosa y muy cercana a mi Venus regente que también se veía muy hermosote y brillante para estar tan cerca de la luna, que normalmente lo camufla todo. He intentado sacarles una foto desde la parada del autobús porque la verdad es que llamaba la atención y valía la pena pero, salía tan horrible con el móvil que os he subido una de la aplicación Stellarium que llevo en el móvil, para que os podáis hacer una idea de lo que veía. Siempre me es muy útil ya que te localiza por GPS y te indica el nombre de los astros que ves en el cielo en ese momento según orientes el móvil. Me ha sacado ya de dudas muchas veces y me ha enseñado a identificar muchas constelaciones y planetas como Sagitario, que la tenía hoy justo debajo de la luna y también la he visto muy bien con su forma de "tetera".
Curioso viaje también hoy hasta el trabajo. Se averió la línea 10 del metro y no tuve más remedio que andar.... mucho. Hacía frío pero ha sido formidable, pasear bajo las cuatro torres de Madrid con la luz del amanecer; desde su base, aún impresiona más su altura, ver el ambientillo casi neoyorkino que se cuece en sus bajos, como si hubiese madrugado hoy sólo para hacer turismo por una ciudad desconocida.
Además he descubierto un parque multiaventura para niños chulísimo y muy bien cuidado situado justo entre las dos últimas torres (mirando desde la Castellana) al que en cuanto tenga oportunidad me gustaría traer a mis trastos, para que se diviertan en un entorno muy distinto al que ellos están acostumbrados a jugar y a que alucinen con la altura de esos edificios.
A veces, lo mejor es dejarse llevar por las circunstancias, aunque parezcan extrañas o te descoloquen un poco, y así poder disfrutar de cosas como este paseo matutino que me ha permitido por un momento sumergirme en otro ambiente y mirar más allá de mis horizontes habituales.
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